Crónica
Pros 15 nombres más a la lista de Multiplicadores
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El interés por convertirnos en televidentes críticos hizo que 15 estudiantes de últimos semestres de la Universidad del Tolima nos reuniéramos en la Universidad de Ibagué, para ver la televisión desde otro ángulo. En cuatro sesiones nos preguntamos acerca de los mensajes de los programas y los comerciales emitidos por este medio, la forma y los pasos en la realización de los mismos y, más que esto, nos permitimos pensar la televisión para hacernos detrás de la cámara y crearla, justo como deseáramos que fuese.
Durante las primeras cuatro horas empezamos a jugar con nuestra imaginación en un muy interesante paseo que nos ayudó a conocernos y, como dicen por ahí, romper el hielo. Pero más allá de eso, empezamos a pensar como un equipo, un colectivo capaz de crear historias, como la de Juanito. Un niño que vivió muchas cosas, tan extrañas e intrépidas que nos hicieron reir a grandes carcajadas, pero que terminaron siendo sólo un sueño. Interesantes discusiones acerca de cuánta televisión vemos al día, o si la vemos desde el televisor o el computador, nos hicieron afirmar cuán diferentes somos el uno del otro y, al mismo tiempo, preguntarnos si hacemos un buen uso de ella.
Es viernes, una nueva sesión debe iniciar a las dos en punto. Hoy debíamos llevar una cámara con función de video, no sabíamos para qué era exactamente. Al llegar al salón las luces estaban apagadas y una luz fuerte proyectaba una imagen en la pared. ¡Es cierto!, dos días antes habíamos acordado que íbamos a ver un capítulo de una serie colombiana y luego una serie internacional. El botón “reproducir” nos introduce a “Los Caballeros las Prefieren Brutas”, entonces entendí que los nombres de los programas también se pueden debatir. Por ejemplo, como mujer me desagrada el hecho de tener que ser bruta para que un hombre contemple la posibilidad de salir conmigo y para un caballero… no sé, mejor dejémoslo así. Sin embargo, este capítulo no concluyó, un error en el archivo hizo que pasáramos a la serie internacional.
Inmediatamente “Bones” comenzó. En este episodio los investigadores del FBI y del Jeffersonian trabajan para condenar a una fiscal, que tenía como Alias “la enterradora”, por el homicidio de un pequeño de diez años. Después de todo el debido proceso la mujer fue declarada culpable, lo que nos hizo concluir que “¡el bien siempre triunfa!”. Un nuevo análisis surgió de la observación de esta serie. Desde los temas tratados, los personajes, sus personalidades y reacciones, hasta los planos utilizados y los efectos sonoros. En fin, todos los elementos que se utilizan para causar emociones en el espectador y que es necesario sepamos para interpretar todo lo que proviene de esa cajita mágica.
Una nueva actividad, aún más divertida inició. Como ya conocíamos qué debíamos tener en cuenta para contar una historia audiovisual ahora debíamos hacer una. En pequeños grupos nos esparcimos por las instalaciones de la Universidad para lograr hacer materiales nuestras ideas. En una hora se crearon cuatro interesantes historias: Supimos todo lo que hacen las mujeres en los baños, lo mal que se puede sentir un hombre al ver las lágrimas de su novia mientras le termina. Nos introducimos en los pensamientos de las personas mientras caminan por la calle y, por último, vimos las medidas que puede tomar alguien en un momento desesperado. El sol se fue y con él la segunda sesión.
Una semana después nos reunimos de nuevo. Esta vez el tema eran los comerciales, algo muy interesante de pensar, ya que en cuestión de segundos la empresa y los publicistas se tienen que encargar de promocionar los artículos de una forma creativa, que entretenga al público y que, al mismo tiempo, lo motive a consumir sus productos. Pero esto no termina allí, ahora además de analizarlo debíamos crear un comercial. El capitán Hídrico, se robó los aplausos mientras cumplía su misión de proteger el agua.
Para nuestro último día nos concentramos en aplicar lo aprendido las doce horas anteriores. Si ya sabíamos lo que hay detrás, ahora debíamos crear algo. Un programa que tuviera justo lo que deseáramos, sin importar que su fin fuera educar, informar o simplemente entretener, o ¿por qué no? que tuviera un poco de todo. El crear algo que no solamente sea para satisfacer nuestro gusto o unas necesidades de mercado, sino por el contrario, que sea para satisfacer las necesidades de la audiencia no es tarea fácil. Pero como siempre hemos sido audiencia, probablemente estemos cerca de lo que las personas en sus casas esperan tener en su programación. Después de tener el programa ideal, ahora debíamos pegar en un televisor de papel todo lo que queríamos para una programación ideal.
La diversidad en lo que cada uno quería de la televisión ratificó lo diferentes que somos y, si esto sucedió en un grupo de quince, ¡imaginen lo que sería pensar en la gente y sus necesidades a lo largo y ancho del territorio nacional! Es importante que nunca olvidemos esto, ya que, para poder comunicarnos de manera efectiva con los demás debemos conocer su contexto cultural, social y económico. Todo esto nos llevará a entendernos con bases de respeto y nos ayudará a construir una sociedad mejor, incluyente, participativa y diversa tal y como somos nosotros. Esto se constituye como una sugerencia para que veamos televisión de otro modo, no de una manera criticona y apocalíptica, sino de una manera crítica y analítica.
Vianny
Estudiante de Comunicación Social y Periodismo
Universidad del Tolima